Buenaventura, ubicada en la costa del Pacífico colombiano, se ha consolidado como uno de los puertos más eficientes y estratégicos de América Latina. Después de Cartagena, es la segunda zona portuaria en movilización de carga en Colombia, y lidera en volumen de carga importada. Su relevancia en el comercio internacional ha sido reconocida por el Container Port Performance Index 2023 del Banco Mundial, donde ocupa el cuarto lugar en eficiencia portuaria en América Latina y el 42 a nivel mundial.
Un Eje Estratégico para el Comercio Exterior
El puerto de Buenaventura es responsable del manejo del 35 % del comercio exterior colombiano, conectando a Colombia con importantes mercados en Asia, Europa y América del Norte. Operando con 11 navieras internacionales, Buenaventura es la puerta de entrada y salida de una amplia gama de productos, desde bienes agrícolas como azúcar y café hasta productos industriales de alto valor agregado.
Según datos de la Asociación Nacional de Comercio Exterior (Analdex), en 2024 Buenaventura ha movilizado 2,5 millones de toneladas de carga, representando el 4,4 % de las exportaciones del país. Productos clave como azúcar, café y bienes agroforestales son exportados desde este puerto hacia mercados como Estados Unidos, Canadá, Alemania y Corea del Sur. Esta diversificación de destinos ha permitido que Buenaventura siga desempeñando un rol crucial en el comercio internacional, a pesar de los desafíos logísticos y de seguridad que enfrenta.
Infraestructura de Clase Mundial
La Sociedad Portuaria Regional de Buenaventura (SPRB) ha jugado un papel fundamental en la modernización del puerto, dotándolo de infraestructura avanzada. El puerto cuenta con el almacén de café más grande del país, con capacidad para almacenar 90.000 sacos, así como un almacén de azúcar con tecnología de última generación, capaz de almacenar hasta 12.000 toneladas métricas. Además, ofrece servicios especializados para cargas refrigeradas, lo que lo convierte en un punto neurálgico para la importación y exportación de productos perecederos.
En 2023, el puerto movilizó 18,9 millones de toneladas de productos, y para 2024 ya ha alcanzado 8,4 millones de toneladas, lo que representa el 33 % de todas las importaciones del país. Entre las mercancías importadas destacan productos clave para la demanda nacional, como químicos, alimentos, maquinaria y productos electrónicos.
Retos y Oportunidades para el Futuro
A pesar de su eficiencia y capacidad, el puerto de Buenaventura enfrenta retos importantes, entre los que se encuentran la congestión vial, la inseguridad y los conflictos sociales. Además, la infraestructura portuaria requiere mejoras para mantener su competitividad. Actualmente, el canal de acceso tiene una profundidad de 12,5 metros, pero para adaptarse a los buques modernos se requiere un dragado que lo lleve a 16 metros. Este proyecto de dragado está previsto para iniciar antes de enero de 2026, según el cronograma presentado por el Gobierno nacional.
El potencial de Buenaventura no se limita solo a su operación portuaria. La ciudad también tiene el potencial de convertirse en un centro logístico regional a través del desarrollo de zonas francas y la expansión de servicios integrados. La modernización de las terminales portuarias, como el Puerto Industrial Aguadulce y la SPRB, ha reducido los tiempos de despacho y ha mejorado la eficiencia en el manejo de contenedores, fortaleciendo su papel en la Alianza del Pacífico, una plataforma clave para el comercio en América Latina.
Una Herramienta para el Desarrollo Social
Más allá de su impacto económico, el puerto de Buenaventura también es visto como un motor de desarrollo social. La gobernadora del Valle del Cauca, Dilian Francisca Toro, subraya que el puerto tiene el potencial de ser un catalizador para la superación de la pobreza, un desafío que afecta a más del 50 % de la población local. La creación de empleos, el fortalecimiento de la infraestructura y la atracción de inversiones extranjeras pueden contribuir a mejorar las condiciones de vida en la región.
Conclusión
Buenaventura se posiciona como un puerto esencial para el comercio internacional de Colombia y América Latina. Si bien enfrenta desafíos significativos, su ubicación estratégica, infraestructura moderna y eficiencia en el manejo de carga lo convierten en un activo invaluable para el país. Con la inversión adecuada en su infraestructura y la atención a los problemas sociales que aquejan a la región, Buenaventura podría convertirse no solo en un centro logístico clave, sino también en un motor de desarrollo económico y social para el Pacífico colombiano.