El papel de las fundaciones empresariales y familiares en Colombia ha cobrado una relevancia creciente en los últimos años. Según datos de la Asociación de Fundaciones Familiares y Empresariales (AFE), durante 2023 estas organizaciones invirtieron más de $1,1 billones en proyectos que beneficiaron a 6 millones de personas en todo el país.
En el Valle del Cauca, el impacto ha sido especialmente notable. Con inversiones que alcanzaron los $97.000 millones, más de 1,1 millones de habitantes de la región se han visto favorecidos por diversos programas y proyectos sociales.
Compromiso empresarial con las comunidades vallecaucanas
Aura Lucía Lloreda, directora ejecutiva de la AFE, destaca el compromiso del sector empresarial del Valle del Cauca con el desarrollo social: «Las empresas de la región están cada vez más comprometidas con las comunidades, escuchando sus necesidades y trabajando conjuntamente para generar cambios positivos».
Las fundaciones están enfocadas en construir respuestas a problemáticas sociales a través de un trabajo colaborativo y de confianza intersectorial. «Creemos que Colombia necesita más conversaciones y alianzas entre sectores para superar los desafíos que enfrentamos como país», agrega Lloreda.
Áreas de inversión y enfoque en la educación
De las 87 fundaciones que conforman la AFE, 49 tienen presencia en la región del Pacífico y 36 operan directamente en el Valle del Cauca. Durante 2023, estas organizaciones desarrollaron más de 205 proyectos en la región.
La educación es el principal foco de inversión, representando el 28% de los proyectos. Las iniciativas incluyen programas de acceso y calidad educativa, mejoramiento de infraestructura, otorgamiento de becas, promoción de la convivencia escolar, fortalecimiento de capacidades institucionales y la incorporación de tecnología e innovación en los procesos de aprendizaje.
Le siguen proyectos orientados a la generación de ingresos (26%), democracia y participación ciudadana (16%), y cultura, recreación y deporte (13%). Estos programas buscan fortalecer el tejido social y económico de las comunidades, promoviendo oportunidades de desarrollo y bienestar.
Respuesta a las necesidades tras el paro nacional
Luego del paro nacional que afectó significativamente a Cali y al Valle del Cauca, las fundaciones empresariales reaccionaron rápidamente para abordar el inconformismo manifestado en las calles. Muchas de ellas implementaron programas de generación de ingresos y fortalecimiento de capacidades, enfocándose en el crecimiento personal y comunitario.
«Las fundaciones llegan a territorios donde a veces hay poca presencia del Estado, logrando dar respuesta a necesidades urgentes», señala Lloreda. Un ejemplo destacado es «Activa Buenaventura», un programa que reúne a varias fundaciones para fortalecer el liderazgo juvenil y promover el desarrollo en esta importante ciudad portuaria.
Impacto y alcance de las fundaciones empresariales
La inversión de $1,1 billones por parte de las fundaciones empresariales representa más de la mitad del presupuesto del Ministerio de la Igualdad, lo que evidencia su impacto en el desarrollo social del país. «Estas organizaciones han trabajado por décadas en los territorios, articulándose con las poblaciones atendidas, los gobiernos, las empresas y la cooperación internacional», afirma Lloreda.
Su labor ha sido fundamental para superar grandes retos sociales que enfrentan las comunidades vulnerables, aportando recursos, conocimiento y experiencia en la implementación de programas efectivos.
El valor de la colaboración intersectorial
La directora ejecutiva de la AFE enfatiza la importancia de la colaboración entre distintos actores para lograr un impacto sostenible: «Siempre hemos promovido el trabajo colaborativo. Este país necesita más generación de confianza intersectorial para superar los desafíos que tenemos».
Las fundaciones empresariales se posicionan así como agentes clave en la promoción de la prosperidad compartida, impulsando proyectos que no solo benefician a individuos, sino que fortalecen comunidades enteras.
Conclusión
El trabajo de las fundaciones empresariales en el Valle del Cauca y en Colombia es un testimonio del compromiso del sector privado con el desarrollo social. A través de inversiones significativas y programas enfocados en educación, generación de ingresos y participación ciudadana, estas organizaciones contribuyen de manera decisiva a la construcción de un país más equitativo y próspero.