En las costas del Pacífico colombiano, Tumaco, un municipio históricamente golpeado por la violencia, está trazando un nuevo camino hacia el desarrollo económico y social con el renacimiento de la industria del camarón. Esta iniciativa, que combina sostenibilidad, equidad de género y prácticas responsables, no solo busca competir con las economías ilícitas, sino también posicionar a Tumaco como un referente en la producción camaronera premium para mercados nacionales e internacionales.
El Proyecto Alianza Camarón: Una estrategia transformadora
Desde 2022, más de 300 familias productoras y 50 familias vinculadas a laboratorios y empresas transformadoras se han beneficiado del Proyecto Alianza Camarón de Tumaco, una iniciativa respaldada por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), la Red Adelco, Codespa, y la Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial (ONUDI).
Este proyecto tiene como objetivo principal reactivar una industria que en décadas pasadas fue emblemática para la región, utilizando un enfoque sostenible que respete el medio ambiente, impulse el desarrollo local y promueva la equidad de género.
Equidad e impacto social: el rol de las mujeres en la industria
Un aspecto clave del proyecto es la inclusión de las mujeres, quienes representan el 85 % de las personas involucradas en el proceso productivo. Muchas de ellas son cabezas de familia que han encontrado en esta actividad una oportunidad para empoderarse y liderar en los distintos eslabones de la cadena de valor del camarón.
“Más que un producto, el camarón de Tumaco representa un símbolo de equidad y desarrollo social”, menciona Miguel Gómez, subdirector estratégico de la Red Adelco.
Buenas prácticas y sostenibilidad ambiental
El proyecto ha introducido estándares de calidad y sostenibilidad en toda la cadena productiva. Entre las medidas implementadas destacan:
- Recuperación de larvas nativas: Garantiza que el camarón producido sea 100 % tumaqueño, lo que fortalece la identidad del producto y su sostenibilidad.
- Prácticas acuícolas responsables: Incluyen monitoreo de piscinas, control del pH y medición de la turbidez del agua, protegiendo los ecosistemas locales.
- Capacitación técnica: Productores locales han recibido formación en bioseguridad, gestión financiera y organización administrativa, con el apoyo de entidades como el INM, ICONTEC, SIC e ICA.
Estas acciones no solo aseguran la calidad del producto, sino que también consolidan a Tumaco como un actor competitivo en el mercado camaronero.
Camarón de Tumaco: Una marca con identidad
La creación de la marca colectiva “Camarón de Tumaco” ha sido fundamental para posicionar el producto en mercados nacionales e internacionales. Esta marca no solo destaca la calidad del camarón, sino también su impacto positivo en las comunidades locales y su compromiso con la sostenibilidad.
“Queremos que el camarón de Tumaco sea un embajador de nuestra riqueza cultural y resiliencia. Es un producto que alimenta y cuenta una historia de esfuerzo colectivo”, afirma Yurany Martínez, coordinadora del proyecto.
Del Pacífico a las mesas gourmet de Bogotá
El camarón de Tumaco ha comenzado a conquistar el mercado gourmet en Bogotá, siendo incluido en los menús de restaurantes exclusivos como Lima Cantón, La Boca de los 4 Mares y Paella de Carlitos. Estos establecimientos no solo valoran la calidad excepcional del camarón, sino también su origen sostenible y el impacto positivo que genera en la región.
Esta conexión entre Tumaco y Bogotá es más que comercial; es un puente que crea conciencia sobre la importancia de consumir productos locales responsables y fomenta el desarrollo sostenible en territorios históricamente marginados.
Un futuro sostenible para Tumaco
A pesar de los logros, el proyecto enfrenta desafíos importantes, como la competencia con economías ilícitas y la consolidación de mercados que valoren atributos diferenciadores como la sostenibilidad y la equidad.
Sin embargo, la trayectoria del proyecto demuestra que un modelo productivo inclusivo y sostenible es posible. Con el apoyo continuo de aliados estratégicos como AECID y la participación activa de las comunidades locales, Tumaco está sentando las bases para un futuro de desarrollo justo y equilibrado.
“El camarón de Tumaco no es solo un producto de exportación; es un símbolo de transformación económica y social. Continuaremos trabajando para que este proyecto sea un referente de resiliencia y esperanza”, concluye Vicente Ortega Cámara, coordinador general de AECID en Colombia.
Conclusión
La industria del camarón en Tumaco no solo revitaliza la economía local, sino que también representa una narrativa de superación, equidad y compromiso con el medio ambiente. Este modelo demuestra que es posible construir un futuro sostenible en una región históricamente golpeada por la violencia, convirtiendo al camarón de Tumaco en un emblema de esperanza y desarrollo.