La empresa Cocochón, reconocida por su producción de bebidas ancestrales del Pacífico colombiano, ha dado un paso histórico al obtener el registro Invima, lo que le permite legalizar y comercializar sus productos en nuevas superficies, y abrir la posibilidad de exportación. Este logro, que marca un hito en la preservación de las tradiciones del Pacífico, ha sido posible gracias al apoyo integral de la Gobernación del Valle del Cauca.
Ordenanza y Apoyo Institucional: Un Respaldo Decisivo
El éxito de Cocochón se inscribe en el marco de una ordenanza promovida por la gobernadora Dilian Francisca Toro, que reconoce y apoya la formalización de las prácticas ancestrales de producción de bebidas tradicionales. Esta iniciativa ha facilitado el proceso de obtención del registro Invima, un requisito fundamental para garantizar que los productos cumplan con las normativas de salubridad y puedan ser comercializados en el mercado nacional e internacional.
Yovy Aragón Hurtado, representante de Cocochón, destacó el impacto de este respaldo:
«Gracias a esta ordenanza, logramos introducir nuestros productos en las Rentas Departamentales de la Gobernación del Valle. Hemos incrementado nuestras ventas y ahora tenemos la posibilidad de exportar nuestras bebidas tradicionales.»
Fonviche: Fomentando la Cadena de Producción Ancestral
En septiembre, la Asamblea del Valle del Cauca aprobó la creación de Fonviche, un fondo diseñado para fomentar y fortalecer la cadena de producción y transformación de las bebidas ancestrales. Esta iniciativa ha sido clave para impulsar a pequeños productores, especialmente en Buenaventura y las zonas rurales, a cumplir con los requisitos legales y acceder a nuevos mercados.
Martha Isabel Ramírez, gerente de la Unidad de Rentas del Valle del Cauca, subrayó la importancia del registro Invima en este proceso:
«Este registro asegura a los consumidores que los productos cumplen con todas las normativas legales y de salubridad necesarias para su distribución. Como Unidad de Rentas, estamos comprometidos a apoyar a los productores en su proceso de legalización.»
Impacto en la Comunidad y el Ecosistema Empresarial
El caso de Cocochón es un ejemplo inspirador para otros productores de bebidas ancestrales. La combinación de respaldo gubernamental, capacitación y formalización ha permitido a esta empresa no solo preservar las tradiciones culturales del Pacífico, sino también transformarlas en una oportunidad de desarrollo económico sostenible.
Además, la ordenanza y la creación de Fonviche promueven una cadena de valor inclusiva, que beneficia a comunidades rurales y urbanas involucradas en la producción, distribución y consumo de estas bebidas.
El Futuro de las Bebidas Ancestrales del Pacífico
La experiencia de Cocochón destaca el potencial de las políticas públicas bien diseñadas para transformar las tradiciones culturales en activos económicos valiosos. El registro Invima no solo abre puertas a la comercialización y exportación, sino que también garantiza la calidad y la seguridad de los productos, generando confianza entre los consumidores y fortaleciendo la competitividad del sector.
Con el apoyo continuo de la Gobernación del Valle y el compromiso de los productores, las bebidas ancestrales del Pacífico están listas para conquistar nuevos mercados y convertirse en un emblema del patrimonio cultural colombiano.