La capital del Cauca se convierte en el epicentro de la gastronomía nacional, acogiendo a miles de visitantes en un festín de sabores y tradiciones culinarias.

Durante cuatro días, del 5 al 8 de septiembre, Popayán dejó atrás las preocupaciones y se sumergió en un ambiente festivo al celebrar el XXII Congreso Gastronómico. Este evento anual, que ya es tradición en la ciudad, resaltó los saberes y sabores de los platos más emblemáticos de las diferentes regiones de Colombia. Más de 45,000 visitantes se dieron cita en el Parque Caldas, corazón del centro histórico, para deleitarse con una variada oferta culinaria y participar en actividades que exaltan la riqueza gastronómica del país.

Un encuentro de tradición y aprendizaje

El congreso ofreció una amplia gama de actividades para todos los gustos. Los asistentes pudieron disfrutar de:

• Conversatorios académicos con expertos en gastronomía que compartieron sus conocimientos y perspectivas sobre la cocina colombiana.
• Muestras culinarias que permitieron degustar platos típicos y contemporáneos, destacando ingredientes locales y técnicas ancestrales.
• Clases de cocina dirigidas por reconocidos chefs, brindando la oportunidad de aprender y experimentar en primera persona.
• Recorridos por las tascas donde emprendedores locales presentaron sus propuestas de cocina tradicional y fusiones innovadoras.

Apoyo institucional y promoción turística

El Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, a través de Fontur, respaldó el evento con una inversión de $2,110 millones. Este aporte busca fortalecer la oferta turística gastronómica de Popayán, integrando aspectos tradicionales para garantizar su continuidad y promoción a nivel nacional e internacional.

Sabores que cuentan historias

La gastronomía de Popayán y del Cauca se lució con una amplia variedad de platos:

• Empanadas de pipián y tamales: recetas tradicionales que reflejan el mestizaje cultural de la región.
• Amasijos y aplanchados: deliciosos panes y dulces que endulzaron el paladar de los visitantes.
• Envueltos de maíz y mantecadas de yuca: muestras de la riqueza agrícola y culinaria local.
• Bebidas típicas como la lulada y el salpicón payanés, refrescando a los asistentes bajo el cálido clima caucano.

Impulso al turismo gastronómico

Arturo Bravo, viceministro de Turismo, destacó la importancia del congreso: «Eventos como este son fundamentales para posicionar la gastronomía como un producto turístico clave. Seguiremos trabajando para revitalizar las prácticas culturales propias de la identidad de la región, fortaleciendo el tejido social y resaltando la diversidad de sabores que tiene nuestro país».

El departamento del Cauca es prioritario para las inversiones en turismo, con más de $48,000 millones destinados a proyectos de infraestructura, competitividad y promoción que impactan a sus 42 municipios.

Guatemala, invitado de honor

En esta edición, Guatemala fue el país invitado, enriqueciendo el congreso con su gastronomía ancestral. En su pabellón, los asistentes pudieron degustar platos como:

• Piloyada antigüeña: una entrada de frijoles piloy con chorizo, cerdo y verduras.
• Subanik: guiso de chiles con pollo, carne y cerdo, servido en hojas de plátano.
• Mole de plátano: plátano bañado en una salsa de chocolate maya.

Óscar Estuardo Villagrán, embajador de Guatemala en Colombia, expresó: «Somos afortunados de compartir nuestros sabores ancestrales con el pueblo colombiano. Estos encuentros fortalecen nuestras cocinas y promueven intercambios culturales entre dos países hermanos».

Popayán, ciudad creativa de la gastronomía

Reconocida por la UNESCO como Ciudad Creativa de la Gastronomía, Popayán continúa consolidándose como un destino imprescindible para los amantes del turismo gastronómico. Su capacidad para congregar cocinas populares y bebidas tradicionales demuestra que la comida es una ventana a la historia y a las tradiciones de un país.

Conclusión

El XXII Congreso Gastronómico de Popayán no solo realzó la riqueza culinaria de Colombia sino que también fortaleció el sentido de comunidad y orgullo cultural. A través de la gastronomía, la ciudad ofreció una experiencia única que combina sabor, tradición y aprendizaje, invitando a nacionales y extranjeros a explorar y disfrutar de todo lo que el Cauca tiene para ofrecer.